Cesión de vivienda
La cesión de una vivienda es un acto jurídico por el cual una persona transfiere a otra el uso y disfrute de una propiedad, sin perder la titularidad de la misma. La cesión puede ser gratuita o a cambio de una contraprestación económica, y puede tener una duración determinada o indefinida.
¿Qué requisitos se deben cumplir para ceder una vivienda?
Para ceder una vivienda, es necesario formalizar un contrato de cesión de vivienda, que debe contener los siguientes datos:
- La identidad y el domicilio de las partes: el cedente (quien cede la vivienda) y el cesionario (quien recibe la cesión).
- La descripción y la ubicación de la vivienda objeto de la cesión, así como su estado de conservación y los servicios e instalaciones disponibles.
- El plazo de duración de la cesión, que puede ser fijo o indefinido, y las condiciones para su prórroga o extinción.
- El importe de la contraprestación económica, si la hubiera, que debe abonar el cesionario al cedente por el uso de la vivienda, así como la forma y el momento del pago.
- Las obligaciones y los derechos de las partes, como por ejemplo el mantenimiento y la reparación de la vivienda, el pago de los gastos e impuestos derivados de la misma, el respeto a las normas de convivencia y al uso adecuado de la propiedad, etc.
- La firma de las partes y, en su caso, la intervención de un notario o un registrador para dar fe pública del contrato.
¿Qué ventajas tiene ceder una vivienda?
Ceder una vivienda puede tener varias ventajas para ambas partes, como por ejemplo:
- Para el cedente: puede obtener un ingreso extra por el alquiler de su vivienda, o bien ahorrar en los gastos fijos que supone mantenerla vacía. Además, puede ayudar a un familiar o a un amigo que lo necesite, o favorecer sus relaciones profesionales o personales con el cesionario.
- Para el cesionario: puede acceder a una vivienda sin tener que comprarla ni hipotecarse, con mayor flexibilidad y menor compromiso que en un contrato de arrendamiento. Además, puede beneficiarse de las condiciones ventajosas que le ofrezca el cedente, como un precio más bajo, una duración más larga o una mayor confianza.